El ciclo infinito de esta historia, comienza cada año con el suave acariciar de los vientos del norte en el desierto de Sonora México. Algunas señales nos indican las reminiscencias de la temporada pasada: las plantas del desierto se mueven en delicadas danzas que anuncian la llegada del monzón, como se conoce la temporada de lluvias en el desierto. El tiempo de sequía ha terminado: débiles lluvias intermitentes preparan la fauna y flora del desierto para el evento más importante del año. Bajo la tierra, una criatura extraordinaria duerme esperando ser despertada...